jueves, 12 de marzo de 2009

alimento

desde chiquita, mamá me inculcó que el tiempo dedicado a cocinar comer lavar platos etc era tiempo perdido de la vida.
y que el dinero invertido en comer era el dinero más malgastado de todos.

supongo que eso es lo que hace que cuando viajo no gasto nada en comida, lo que me permite comer 3 días seguidos lo mismo, comer fideos o arroz solo con manteca y que no me parezca una comida incompleta, que comer criollitas solas de desayuno me parezca que está bien, etc.
con el tiempo fui aprendiendo a dedicarle más tiempo y plata a la comida, pero solo en ciertas ocasiones.

en el horario de almuerzo laboral, por ejemplo, me parece un despropósito gastar en una comida que tenés que comer rápido, que si la comprás hecha nunca es tan rica como cuando la hacés vos y demás. y eso que paternal es barato.

mi hermana un día me dijo. ¿te podés comprar comida por $4 y te llevás comida de tu casa?
ahora ya sale $7. y me sigo trayendo comida.

y cuando no tengo, espero pacientemente a que todos terminen de comer, porque siempre hay alguien que se llena más rápido de lo que se vacía su bandejita.
y no pueden comer más.
y entonces "che, querés ensalada?" o tomates, o medio sandwich, o una empanada. todo suma, todo sirve.
hoy cuando me dieron una bandejita llena de ensalada, concluí:

la debilidad ajena es mi alimento

ya no sería la supervivencia del más fuerte, sino algo así como la supervivencia del-que-tiene-débiles-al-lado

3 comentarios:

el_iluso_careta dijo...

comé bien loca...es necesario...

Anónimo dijo...

si, deja de amarretear en comida, mejor gastar en comida que en medicamentos y médicos.

duda dijo...

simplemente genial!